¿Has oído nunca que los perros se parecen a sus dueños? ¿O tal vez sea al revés, y son los dueños los que se parecen a sus perros? Pero hay excepciones…
Si uno va andando por las calles y los parques de la ciudad, verá que todos los perros se parecen a sus dueños. Sin embargo, el perro de Leonora no se parece en nada a ella. De hecho, ¡no podrían ser más diferentes! A Leonora le gustaba la ópera. Por eso le puso a su perro el nombre de Fidelio, en honor a su ópera favorita. Todo el mundo les miraba muy raro cuando paseaban por la calle… «¡Pero si... Leer más
¿Has oído nunca que los perros se parecen a sus dueños? ¿O tal vez sea al revés, y son los dueños los que se parecen a sus perros? Pero hay excepciones…
Si uno va andando por las calles y los parques de la ciudad, verá que todos los perros se parecen a sus dueños. Sin embargo, el perro de Leonora no se parece en nada a ella. De hecho, ¡no podrían ser más diferentes! A Leonora le gustaba la ópera. Por eso le puso a su perro el nombre de Fidelio, en honor a su ópera favorita. Todo el mundo les miraba muy raro cuando paseaban por la calle… «¡Pero si... Leer más
¿Has oído nunca que los perros se parecen a sus dueños? ¿O tal vez sea al revés, y son los dueños los que se parecen a sus perros? Pero hay excepciones…
Si uno va andando por las calles y los parques de la ciudad, verá que todos los perros se parecen a sus dueños. Sin embargo, el perro de Leonora no se parece en nada a ella. De hecho, ¡no podrían ser más diferentes! A Leonora le gustaba la ópera. Por eso le puso a su perro el nombre de Fidelio, en honor a su ópera favorita. Todo el mundo les miraba muy raro cuando paseaban por la calle… «¡Pero si no se parecen en nada!», decían, riéndose a carcajada limpia de ellos. Dos calles más arriba vivía Carmelo. Y su perro Tampoco se le parecía en nada. En nada de nada. A Carmelo le gustaba hacer bombones. Solía pasarse días enteros inventando las recetas más atrevidas.
¡El caso es que el perro de Carmelo era clavado a Leonora, y el de Leonora era exacto a Carmelo! Cansados de que la gente los despreciara, decidieron intercambiarse los perros y así parecer más normales. Pero justo cuando deberían encajar, más solos y diferentes se sentían…
«Steinitz embellece su historia con representaciones divertidas de parejas de dueños y perros que se les parecen, con un telón de fondo que combina tonos verdes azulados y leonados y ambientes vintage y contemporáneos. Pero debajo de la apariencia alegre del libro hay un mensaje resonante que invita a mirar más allá de las apariencias y apreciar las diferencias.» —Publishers Weekly
«Las ilustraciones, centradas en representar a los personajes y los coloristas escenarios urbanos en los que transcurre la acción, permiten amplificar los sentimientos y sensaciones que viven los protagonistas, tanto humanos como animales.» —Canal Lector
«Esta inteligente historia llena de ilustraciones que representan ambientes dispares ofrece una versión alegre del tema universal: “sé tú mismo”.» —Kirkus Reviews
Biografía del autor e ilustrador
Nacida en 1978 en la ciudad alemana de Friburgo, Barbara Steinitz estudió comunicación, diseño e ilustración en Saarbrücken (Alemania) y en Barcelona (España). Después de obtener su diploma, realizó un voluntariado en Granada (Nicaragua) enseñando talleres de artes y oficios para adultos y niños y comenzó a explorar e incluir el teatro de marionetas en su trabajo como ilustradora. Ha creado varios espectáculos de teatro de papel en colaboración con el músico Björn Kollin y el conjunto mexicano Facto Teatro. Junto con el bailarín y coreógrafo Ruben Reniers fundó el conjunto Rubarb Dance & Art. Hizo una gira internacional dirigiendo talleres y presentando sus espectáculos y libros en escuelas, bibliotecas y festivales de teatro de marionetas de renombre. Recibió el Premio del Libro Infantil de Austria, el premio del Libro Ilustrado Troisdorfer y una nominación para el Premio del Libro Infantil Alemán. Como ilustradora freelance, autora y titiritera, trabaja para varios clientes, editoriales y proyectos de teatro, y vive entre Berlín y la ciudad de México.
¿Has oído nunca que los perros se parecen a sus dueños? ¿O tal vez sea al revés, y son los dueños los que se parecen a sus perros? Pero hay excepciones…
Si uno va andando por las calles y los parques de la ciudad, verá que todos los perros se parecen a sus dueños. Sin embargo, el perro de Leonora no se parece en nada a ella. De hecho, ¡no podrían ser más diferentes! A Leonora le gustaba la ópera. Por eso le puso a su perro el nombre de Fidelio, en honor a su ópera favorita. Todo el mundo les miraba muy raro cuando paseaban por la calle… «¡Pero si no se parecen en nada!», decían, riéndose a carcajada limpia de ellos. Dos calles más arriba vivía Carmelo. Y su perro Tampoco se le parecía en nada. En nada de nada. A Carmelo le gustaba hacer bombones. Solía pasarse días enteros inventando las recetas más atrevidas.
¡El caso es que el perro de Carmelo era clavado a Leonora, y el de Leonora era exacto a Carmelo! Cansados de que la gente los despreciara, decidieron intercambiarse los perros y así parecer más normales. Pero justo cuando deberían encajar, más solos y diferentes se sentían…
«Steinitz embellece su historia con representaciones divertidas de parejas de dueños y perros que se les parecen, con un telón de fondo que combina tonos verdes azulados y leonados y ambientes vintage y contemporáneos. Pero debajo de la apariencia alegre del libro hay un mensaje resonante que invita a mirar más allá de las apariencias y apreciar las diferencias.» —Publishers Weekly
«Las ilustraciones, centradas en representar a los personajes y los coloristas escenarios urbanos en los que transcurre la acción, permiten amplificar los sentimientos y sensaciones que viven los protagonistas, tanto humanos como animales.» —Canal Lector
«Esta inteligente historia llena de ilustraciones que representan ambientes dispares ofrece una versión alegre del tema universal: “sé tú mismo”.» —Kirkus Reviews
Nacida en 1978 en la ciudad alemana de Friburgo, Barbara Steinitz estudió comunicación, diseño e ilustración en Saarbrücken (Alemania) y en Barcelona (España). Después de obtener su diploma, realizó un voluntariado en Granada (Nicaragua) enseñando talleres de artes y oficios para adultos y niños y comenzó a explorar e incluir el teatro de marionetas en su trabajo como ilustradora. Ha creado varios espectáculos de teatro de papel en colaboración con el músico Björn Kollin y el conjunto mexicano Facto Teatro. Junto con el bailarín y coreógrafo Ruben Reniers fundó el conjunto Rubarb Dance & Art. Hizo una gira internacional dirigiendo talleres y presentando sus espectáculos y libros en escuelas, bibliotecas y festivales de teatro de marionetas de renombre. Recibió el Premio del Libro Infantil de Austria, el premio del Libro Ilustrado Troisdorfer y una nominación para el Premio del Libro Infantil Alemán. Como ilustradora freelance, autora y titiritera, trabaja para varios clientes, editoriales y proyectos de teatro, y vive entre Berlín y la ciudad de México.